Par de semanas con mucho movimiento... pero de movimiento rutinario. Casi como una invocación maligna para despertar viejos recuerdos (rencores? tristesas? depresiones? ----> chelas) un amigo menciona el tema de las EX; sí, esas EX q nunca dejarán de ser tus EX y en ocasiones serán una pequeña mancha en tu sentimental historial.
No soy un dolido rencoroso que no puede hablar de sus EX sin ponerse a llorar, ni siquiera necesito estar ebrio para poder hablar de ellas, ya que por interesantes gambetas del destino, no odio a ninguna de ellas (eso es cuestionable ---> MENTIRA ENORME) y menos les deseo algo malo (bueno eso es verdad) solo que no hay nada interesante en hablar de ellas, prefiero hablar de aquellas que nunca llegaron a ser EX, ya que nunca llegaron a ser nada en realidad
Generalmente, en el casi automático andar de cada uno por el camino de nuestras vidas, cruzamos con personas a las que nosotros mismos marcamos (distinguimos, seleccionamos, resaltamos, elegimos, subrayamos, lo que quieran...) porque creemos que pueden marcar una diferencia en nuestra vida (por no decir que son inteligentes, carismáticas.... o que simplemente están buenas)
Dependiendo de las circunstancias en algún momento podemos entablar una conversación con esta persona, y es entonces cuando TÚ, la persona más ilusionada del mundo, busca puntos en común y temas de interés para compartir... no te preocupes, en la mayoría de los casos los encuentras.
La experiencia cuenta que, una de las peores situaciones en las que un hombre se ve enfrascado, es la imposibilidad de acercarse a entablar conversación con esta persona, ya sea por miedo o por obra y gracia de terceras personas, es ahí cuando uno tiene que realmente poner en juego todas sus cartas y hacer mil y un mágicos amagues para conseguir tu objetivo... dicho sea de paso que casi nunca se consigue a menos que la otra parte coopere a esto.
Después de un par de semanas de conversaciones (gileos) decides dar el "gran golpe" y te mandas, te botas, te lanzas o como quieras llamarlo. Una vez más como la persona mas ilusionada del mundo esperas recibir una respuesta afirmativa de parte de esta persona y así compartir mucho más tiempo con ella, poder abrazarla, buscarla, llamarla, etc... PERO NO! resulta que la respuesta que recibes es negativa, ya sea porque no supiste como decirlo o porque la contraparte no esta dispuesta a aceptar la relación, entonces para no sacarte de tus cabales (y mientras tu alma se desmorona poco a poco por dentro) recibes mil y un excusas divertidas, entre las cuales figuran:
1.- Solo te quiero como un amigo
2.- Le gustas a una de mis amigas y no puedo traicionarla
En fin, unas semanas después tras la necesaria y saludable temporada deprimente en tu pequeño hogar, en la que te preguntas constantemente que hiciste mal o cuál es tu defecto (y también después de un par de chelas con tus patas), das un paso adelante y decides seguir con tu vida, esperando que por ahí encuentres (de verdad esta vez) a la persona que marcará la diferencia en tu vida.
Dicen que mientras más la buscas menos llega y bueno quién comprende a la vida, solo nos queda recorrerla pensando que así como nosotros buscamos a alguien, probablemente este alguien también nos busca a nosotros, reconfortante no?... es una lástima que este alguien generalmente está al otro lado del mundo...